Con Prohibido Suicidarse en Primavera, Alejandro Casona vuelve al teatro donde parecen enfrentarse fantasía y realida: en definitiva, lo que el dramaturgo hace es una prédica en favor de la vida, de la felicidad y del amor. Este es muy elocuente el trabajo, la Casona vuelve a su género favorito: jugar, y vuelve al lugar de su nacimiento, el de Asturias, donde se estira el cuento de la vida, la felicidad y el amor. El clásico español de un cuento de hadas.